miércoles, 4 de enero de 2017

Correspondencia

Hoy te escribí. Sí, lo hice.

Tengo ganas de verte, puse.

Pero lo dejé en el borrador.

- Soy una cobarde - admití.

Recuerdo una vez que me gritaron un te quiero y no fui capaz de desnudar mi corazón.

Recuerdo cuando al final se alejó de mi.

Hoy me atormenta el debate, tengo miedo del bucle. ¿Por qué cuesta tanto gritar lo que se siente?

Siempre les digo a mis amigos que pueden confesarse conmigo, que soy una tumba.

Ojalá supieran que literales pueden llegar a ser mis palabras, que carcel llevo a rastras.

Ojalá pudiera decirle todo lo que siento, ojalá pudiera deshacerme de estas cadenas.

Ojalá un te quiero de mis labios pudiese volar, creyendo ser libre.

No hay comentarios:

Publicar un comentario